Escrito por: Jesús Rodríguez
Hoy me levante con una noticia triste, seguimos encerrados por seguridad. Si digo triste porque a mí también me gustaría no estar en esta situación, pero sinceramente prefiero que yo y mi familia estemos sanos y salvos. La situación es complicada para todos y no deseada para muchos más, pero es lo que nos toca vivir. Porque suceden las cosas no es algo que pueda ni quiera contestar, pero si preguntar. Recuerden que a pesar de todo, soy igual que ustedes y vivo las mismas circunstancias del país que tú.
Algo que sí me molesta, es una noticia que vi una semana después de la llamada cuarentena. La noticia recogía los números de muertes por violencia de género. A esto puedo decir que me aterra vivir en un mundo donde la mayor amenaza somos nosotros mismos. Un virus no nos matara a todos, seremos nosotros mismos los que así terminaremos la tarea. Entonces esto va directo a todos aquellos que entienden la violencia resolverá algo en sus vidas. Primero que todo matar, golpear, violar o maltratar a alguien que escogiste para pasar tu vida te hace una analfabeta. Tengo que ser así de fuerte para que entiendas que tú escogiste a esa persona porque representó algo en tu vida. Sea la razón que sea por la cual estás con esa persona, tú la escogiste.
Entonces hacerle daño a alguien a quien tú escogiste dice dos cosas de ti bastante denigrantes. La primera es que tú no te amas y no te respetas a ti mismo. La segunda es que tú autoestima es tan absurdamente mala que para sentirte de valor o con honor atacas a otro. Señoras y señores entiendan que mientras estamos molestos es el peor momento para hablar y para actuar. Luego internalicen esto por favor la mejor manera de tomar las riendas de tu vida es no perdiendo la cabeza en un escalón de tu vida que puedes sobrepasar con un poco más de trabajo.
A las víctimas quiero dejarles saber que no tienen por qué sentirse mal, ustedes no fallaron. Digo que no fallaron porque nada justifica un ataque físico, verbal o psicológico a quien una vez dijiste que querías. Por lo tanto, no se agobien, ni se escondan de esta situación, vayan a las autoridades pertinentes y busquen ayuda. Es difícil y muy riesgoso pero la otra alternativa es sentarse a esperar la muerte y creo que mientras haya vida, hay soluciones.
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